Este se logra por lo general con uvas Vernaccia de San Gimignano, pero se puede añadir incluso otras uvas no aromáticas (en una cantidad no superior al 10%): Sauvignon y Riesling. Es un vino que ha obtenido tanto de la Denominación de Origen en 1966, como la Denominación de Origen Controlada y Garantizada en 1993.
Tratamiento: las uvas se prensan ligeramente y se fermentan en depósitos de acero inoxidable a una temperatura controlada de dieciocho grados. Siempre en estos tanques se le añade la levadura durante cinco meses y luego se embotella el vino.
Descripción: El color es amarillo pajizo con reflejos verdes y, durante el envejecimiento, de oro. Tiene un aroma de flores (ginesta, mimosa y tilia) y fruta (manzanas, uvas, peras y cítricos). El sabor es equilibrado, seco y aromático, con cuerpo y persistente, con un final agradablemente amargo.
Maridaje: es ideal para acompañar aperitivos y platos principales, ensalada de arroz y pasta, ribollita, platos de pescado (cocido, frito o al horno), incluso crudos, carnes blancas, verduras, quesos frescos y semimaduros.