Su característica más distintiva es que la ciudad, reconstruida después del terremoto devastador de 1693, ahora parece estar dividida en dos grandes “barrios”, dos almas unidas por una escalera larga y sugerente. Por un lado, Ragusa Ibla, la parte más antigua y fascinante de la ciudad, su buque insignia, que ofrece una estructura medieval y barroca. Por otro lado, Ragusa Superiore, la nueva ciudad. Ragusa Ibla se separó administrativamente del resto de la ciudad en 1865, convirtiéndose en un municipio independiente, donde se unen de forma permanente a la ciudad de Ragusa, en el año 1927. Situado en una pequeña colina, el barrio cuenta con más de cincuenta iglesias y numerosos palacios de estilo barroco y es el hogar de algunos eventos importantes y antiguas tradiciones como Ibla bukers, el festival de artistas callejeros, el concurso de música internacional Ibla Grand Prize y la fiesta del patrón S. Giorgio.
10 COSAS QUE HACER EN RAGUSA
1. DISFRUTAR DEL INCREÍBLE PANORAMA DE RAGUSA DESDE LA IGLESIA DE SANTA MARIA DELLE SCALE, situada justo en la frontera entre Alta Ragusa y Ragusa Ibla.
2. VISITAR A LA CATEDRAL DE SAN GIORGIO, que domina la plaza del mismo nombre, corazón barroco de Ibla, y está enmarcada por palacios barrocos y del Circolo di Conversazione, palacio neoclásico del siglo XIX.
3. PASEAR POR EL JARDÍN IBLEO, el más antiguo de los cuatro principales jardines de la ciudad, construido en 1858. Se asienta sobre un promontorio rocoso que domina el valle Irminio y es el hogar de tres iglesias y el monumento a los caídos de la prima guerra mundíal.
4. RESERVAR UNA DEGUSTACIÓN O UNA VISITA GUIADA EN PALAZZO AREZZO DI TRIFILETTI, mansión señorial de estilo neoclásico propiedad de la familia Arezzo Trifiletti.
5. HACER UN SALTO EN EL PASADO VISITANDO EL CASTILLO DE DONNAFUGATA, suntuosa residencia noble de estilo neogótico coronado por dos torres laterales. El castillo cuenta con más de 120 habitaciones, un parque monumental de 8 hectáreas y un laberinto trapezoidal.
6. . DISFRUTAR DE PLATOS SEDUCTORES Y BARROCOS DE TRADICIÓN ISOLANA en el Restaurante Il Duomo (via Cap. Bocchieri 31), emblema de la excelencia de la mano de Ciccio Sultan. Dos estrellas Michelin, una resistencia obstinada, un espíritu atado al lugar y una pasión por la cocina kilómetro cero.
7. COMER FABULOSOS ARANCINI en la arancineria Arà (via Tindari, 13), pequeño y colorido local de estilo fast food que sirve una variedad de gustos. Buen precio y excelente calidad.
8. CONCEDERSE UNA GOLOSA PAUSA CON DULCES DE LA TRADICIÓN en Pasticceria Di Pasquale (corso Vittorio Veneto, 104), punto de referencia desde 1950. Levadura fresca, bollos de leche que se rellenan al momento, pasteles de almendra, cannoli, cassata, pero también pastas saladas.
9. RESPIRAR AIRE DE MAR ALMORZANDO O CENANDO EN LA PLAYA en Lido Azzurro “Da Serafino” (Lungomare A. Doria), restaurante anexo al balneario que propone cocina marinera lineal, interpretada de acuerdo con las materias primas, para saborear arrullado por las olas.
10. ALOJARSE EN LA SICILIA RURAL reservando habitación en Masseria Boscorotondo (Contrada bosco rotondo – Scicli), una antigua mansión rural llena de estilo ibleo construida en el año 800 en una excelente posición, entre el mar (a tan sólo 3 km de distancia) y la Scicli de siglo XVIII.