Burano se levanta en cuatro islas de la Laguna Veneciana y forma parte de la ciudad de Venecia, las pequeñas islas que la componen están separadas por el río Pontinello, el río Giudecca y el río Terranova. Su fama está inextricablemente ligada a la producción de encaje, una excelencia que es tan popular como la artesanía del vidrio hecha en el cercano Murano.
Fundada por refugiados de la antigua ciudad romana de Altinno, Burano se encontraba sobre casas sobre pilotes, que se convirtieron en casas de ladrillo solo en el año 1000. Una característica típica de Murano son sus casas tradicionales, que destacan por sus vivos colores. El centro de la ciudad se encuentra alrededor de la plaza Baldassarre Galuppi, en la que se domina la iglesia de San Martino, el único lugar sagrado consagrado de la isla, famoso por su campanario pendiente. La iglesia merece una visita también para ver La Crucifixión de Giamanttista Tiepolo. Lo que una vez fue la iglesia del Capuchino, por otro lado, ha sido sede de un centro de exposiciones durante unos años un centro de exposiciones dedicado a exposiciones y eventos culturales. Uno de los lugares más folclóricos de Murano son los llamados Tre Ponti (Tres puentes) que conectan los barrios de San Mauro, San Marino y Giudecca, una zona donde se pueden encontrar principalmente casas de pescadores y talleres de artesanos.
La tradición vinculada a la producción del famoso encaje de Burano está relacionada con la producción textil, gracias a la cual en la isla comenzó una producción que ahora tiene una tradición centenaria, ya que se remonta al siglo XVI. Los primeros cordones se hicieron en Burano alrededor del siglo 16 en relación con la actividad realizada para las familias aristocráticas, y se destacaron por sus patrones ornamentales como diseños geométricos pero también animales y flores. En el siglo siguiente, la producción de estos artículos típicos siguió creciendo evolucionando gracias a la técnica de bordado «punto a rosette» que se hizo popular en toda Europa gracias a los bordadores de Burano.
Además, Burano también es famoso por la bussolà, galletas especiales en forma de rosquilla hechas con harina, mantequilla y yema.
Foto de portada: fulviatour