En el 2013 fue elegido, de hecho, como el año de la inauguración del agroturismo de nombre curioso Ben Ti Voglio, un proyecto en el que la joven pareja ha dedicado cuerpo y alma. Para limitar la propiedad hay una viña, un olivar, y diversos àarboles frutales cuyos frutos se utilizan para producir mermeladas de fresas, cerezas, albaricoques y membrillos, siempre listos en la mesa para el desayuno, la comida más importante del día. En el Agroturismo Ben Ti Voglio también se ejerce la apicultura, de la cuál se se deriva una gran miel biológica destinada a productos dulces y salados. Totalmente reconstruida desde cero siguiendo las líneas arquitectónicas de los mapas catastrales del siglo XVIII, la estructura del Agroturismo Ben Ti Voglio se presenta ahora con un sabor entre lo rural y lo moderno.
El empleo de un riguroso plan de ahorro de energía, perspectiva sostenible en todos los detalles, Ben Ti Voglio ha previsto un sistema de paredes de aislamiento, el uso de doble acristalamiento, ventilación del techo y calefacción mediante una caldera a base de astillas de madera. Y como si todo esto no bastara, para la purificación de aguas residuales, el agroturismo utiliza un sistema biológico que se purifica mediante el uso de bacterias particulares. El respeto absoluto del territorio se lleva a cabo con la recogida selectiva de vidrio, plástico, papel y residuos orgánicos.
Construido en un ambiente agradable y acogedor, el restaurante del Agroturismo Ben TiBen TiBen TiBenTiBen Ti Voglio sólo abre los fines de semana, pero está dispuesto, con reserva previa, para cada tipo de evento y ceremonia. El suyo es un menú típico de EmiliaRomagna, que se caracteriza por sabores fuertes pero de gran simplicidad, dedicado al redescubrimiento de sabores antiguos a través de la caza a nivel local. El jabalí es el plato principal, de las cenas suculentas que ofrece el Agroturismo Ben Ti Voglio.
Una pequeña joya que enriquece la estancia en este pequeño oasis de paz con la presencia de clases de tiro con arco o tiro instintivo, donde se debe dar el blanco en algunas siluetas de animales recreadas en los arbustos como si fueran reales. A pocos kilómetros de la finca se puede dar un paseo y hacer un pícnic al aire libre en el majestuoso y antiguo Parco dei Gessi y Calanchi dell’Abbadessa.