Dices Piazza del Campo y piensas en el Palio de Siena, pero en realidad es la misma plaza la que es una obra de arte, y como tal sin tiempo, como la propia Toscana, una de las regiones más fascinantes de Italia.
Entre sus perlas más preciosas está Siena, una ciudad rica en historia y cultura conocida sobre todo por Piazza del Campo. En este artículo, exploraremos este lugar que encanta a los visitantes con su majestuosidad y su atmósfera única.
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Toscana es conocida no solo por su belleza natural, caracterizada por colinas verdes, viñedos exuberantes y paisajes únicos que capturan la imaginación de artistas y viajeros de todo el mundo, sino también por el patrimonio histórico y cultural de las diversas ciudades.
En el centro de esta región por descubrir se encuentra Siena, un lugar que transporta a los visitantes en el tiempo gracias a sus sinuosas callejuelas, edificios históricos y plazas fascinantes, sumergiéndolos en una época de esplendor artístico y cultural donde los barrios que la componen aún saben ser enemigos deportivos.
Piazza del Campo, una verdadera obra de arte arquitectónica
Situada en el centro de Siena, Piazza del Campo (también conocida como Il Campo) es una verdadera obra arquitectónica, famosa por su majestuosidad y su forma de «concha». Esta forma particular no es casual. Ha dependido de ser un terreno escarpado en el que confluían las calles de la ciudad antigua. La razón por la que Piazza del Campo es cuesta abajo se explica por el uso original del suelo drenado, es decir, el flujo de agua de lluvia.
La disposición radial de la plaza, con el amplio espacio central que se abre hacia el exterior, crea un ambiente acogedor y sugestivo. Lo que la hace tan interesante son también los palacios medievales que la rodean y la Torre del Mangia que se eleva sobre el panorama.
Construida en el siglo XIII como símbolo de la fusión de tres antiguas ciudades montañosas de la comunidad de Siena (de ahí el nombre de Il Campo), ha sido el corazón de la vida social, política y económica durante siglos. No en vano ha sido reconocido por la UNESCO por su importancia histórica y arquitectónica.
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Lo que la hace única es la homogéneneneidad arquitectónica de la plaza (el pavimento de ladrillo rojo colocado en cola de pescado, dividido por líneas de travertino blanco, crea una disposición simbólica que mira hacia el Palacio Público y rinde homenaje a la santa patrona Virgen María replicando los pliegues de su manto) y los edificios circundantes (los edificios debían ser construidos siguiendo precisas directrices, so pena de su demolición, como sucedió con la antigua iglesia de San Pedro y San Pablo.
Basta con mirar Piazza del Campo para tener la sensación de encontrarse en un lugar donde el tiempo parece detenerse: sus piedras seculares y su majestuosa arquitectura transportan a otra época, reviviendo la grandeza del pasado.
A lo largo de los siglos, la plaza ha sido espectadora de acontecimientos históricos importantes y ha acogido celebraciones, torneos y mercados, y hoy sigue siendo un lugar de encuentro y celebración, conservando intacta su esencia de pasado glorioso.
La carrera del Palio de Siena
Piazza del Campo es también conocida por albergar el famoso Palio di Siena, una competición ecuestre de sabor medieval que se celebra dos veces al año, el 2 de julio y el 16 de agosto.
Durante el Palio, los contradaioli (representantes de cada barrio) se enfrentan en una carrera emocionante alrededor de la plaza. Este evento tradicional atrae a miles de espectadores, que llenan los espacios alrededor de la plaza para asistir a una de las carreras más emocionantes e intensas de Italia.No se puede comparar con el perfecto programa de televisión que la dio a conocer en todo el mundo.
Qué ver cerca de Piazza del Campo
El Palazzo Pubblico y la Torre del Mangia son los símbolos más emblemáticos de la Piazza di Siena, pero Il Campo está lleno de otros tesoros y atracciones por descubrir. Averigüemos qué ver cerca de él.
- Palazzo Pubblico – Palazzo Pubblico, con vistas a Piazza del Campo, fue el centro del famoso «Gobierno de los Nueve de la República de Siena». Hoy en día, este edificio alberga el Museo Cívico y alberga numerosas obras maestras.
- Torre del Mangia – Con sus más de cien metros de altura y la combinación de los ladrillos de la estructura y el travertino blanco de la cima, Torre del Mangia domina la plaza con su majestuosa presencia. ¿Por qué se llama «del Mangia»? El campanario Giovanni di Balduccio era conocido por despilfarrar el dinero en el juego, es decir, un «mangiaguadagni».
- Capilla de la Plaza – Situada en la base de la Torre del Mangia, la Capilla de la Plaza es la expresión de la gratitud de la población a la Virgen María por haber sobrevivido a la terrible «Peste Negra» del siglo XIV. Este lugar, con sus pilares de mármol decorados y su significado simbólico, ofrece un testimonio de la devoción religiosa de Siena.
- Fonte Gaia – Se encuentra frente al Palacio Público y la Torre del Mangia y representa un punto focal para la ciudad, a pesar de ser una reproducción del siglo XIX del original de Jacopo della Quercia (conservado en el complejo museístico del Hospital de Santa Maria della Scala). La copia de Tito Sarrocchi es alimentada por kilómetros y kilómetros de túneles subterráneos del acueducto y presenta grabados en mármol muy sugestivos.
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La gastronomía como viaje experiencial único
Durante los calurosos días de verano, Piazza del Campo se anima con las mesas de los cafés y restaurantes, ofreciendo a los huéspedes la oportunidad de disfrutar de un descanso relajante inmerso en su ambiente único.
Saboreando los platos locales mientras, sentados, se admira la arquitectura, la historia y el ambiente de la plaza, es posible vivir una experiencia inolvidable.
Siena cuenta con una rica y apreciada tradición culinaria, desde las tablas de embutidos típicos como el salami de Cinta Senese a los pici all’aglione hasta la tripa senesa, concluyendo con un panforte o los ricciarelli. Todo acompañado de una buena copa de vino Chianti. Siena es una ciudad seductora, déjese conquistar.
Copertina: palazzoravizza
