Lo que le hace tan particularmente interesante es la morfologia cárstica – el efecto de un tipo de interacción muy específica entre el agua que se filtra y la roca calcárea, que es en realidad muy común a la extremidad septentorial del país. Además, es una de las pocas cuevas del mundo donde estalactitas y estalagmitas no crecen verticalmente sino lateralmente, muchas veces en forma de arcos que superan las leyes de la gravedad.
Este es el resultado de una serie de factores entre los cuales, viento, composiciones minerales, entre otros – haciendo que vistar la cueva sea una experiencia inolvidable. Las cuevas son tan largas que aún no han sido totalmente exploradas. Una operación de extracción en el año 2006 descubrió un nuevo pasaje muy prometedor, pero desgraciadamente aún debe ser investigado por falta de fondos. Vuestra visita contribuirá a financiar este objetivo.