A pesar de ser uno de los balnearios más famosos y apreciados de Italia, las Cinque Terre son localidades turísticas italianas perfectas para viajes cortos o puentes de pocos días y son un destino ideal en cualquier périodo del año. No es casualidad que las Cinque Terre formen parte del Patrimonio Mundial de la UNESCO. Están formadas por un panorama de incomparable belleza, suspendidas entre el mar y las verdes colinas. Proporcionan a quienes los visitan un patrimonio enogastronómico de gran valor que hace de estos bellos y pintorescos pueblos costeros un escenario ideal para pasar una estancia maravillosa, aunque sea por unos días.
- Monterosso
- Vernazza
- Corniglia
- Manarola
- Riomaggiore
Credits: Cinque Terre Outdoor
El Parque Nacional de las Cinque Terre es una de las localidades turísticas italianas más características y no está lejos de La Spezia. Ofrece muchas ideas para unas vacaciones llenas de atractivos: desde el senderismo por el entorno inmediato, pasando por el parque natural en el que están inmersos los pueblos, hasta la visita a los pequeños y encantadores cascos antiguos con su antigua arquitectura tradicional, todo ello en nombre de la relajación y la tranquilidad. Una auténtica obra maestra de naturaleza, arte e historia que ha llevado a los cinco pueblos a ser uno de los destinos turísticos italianos que más atrae a turistas de todo el mundo.
Monterosso
Credits: Lonely Planet
Es el pueblo más grande y antiguo de las Cinque Terre.Vale la pena visitar el corazón del pueblo, pero la nueva parte llamada Fegina es tan interesante, donde se encuentra la villa del poeta Eugenio Montale, ganador del Premio Nobel. También se pueden ver los restos del «Dios Gigante Neptuno», una estatua que originalmente sostenía una terraza en forma de concha pero que fue arruinada por los bombardeos y la erosión del mar. No hay que perderse la excursión que conduce a la encantadora Punta Mesco, por el sendero que conduce al abandonado faro.
Vernazza
Credits: Lonely Planet
También se puede llegar a este pueblo caminando por el camino que lo conecta con Monterosso, a través del Parque de las Cinque Terre. Este pueblo de pescadores conserva todo su encanto antiguo. Para ver la iglesia de Santa Margherita di Antiochia, desde donde se puede llegar al Santuario de Nuestra Señora de Reggio. El pueblo ha conservado su aspecto más antiguo con el puerto natural, las casas-torre y los “caruggi”. No se pierda el Castillo de Doria del siglo XI, que domina la ciudad desde lo alto del promontorio frente al mar.
Corniglia
Credits: Lonely Planet
Una hora y media de camino separa Corniglia de Vernazza. A lo largo del camino se llega al punto más alto de la zona, Prevo, desde donde se puede disfrutar de una vista de impresionante belleza. Elogiado también por Boccaccio en el Decamerón, Corniglia es el único pueblo que no tiene vistas al mar, sino que se alza sobre un promontorio de 90 metros de altura y está rodeado de viñedos. Aquí todavía se pueden ver los restos de la arquitectura medieval y los restos de la fortificación genovesa del `500. También merece la pena visitar la iglesia de San Pietro del siglo XIV, construida con pizarra y mármol de Carrara.
Manarola
Manarola también ofrece una vista de gran belleza, sporta como es desde arriba en el Mar de Liguria. Su centro histórico es también hermoso, el más pequeño de las Cinque Terre, donde destacan la iglesia de la Natividad de la Santa Virgen, el Oratorio de los Disciplinados del siglo XV, el Baluarte y el Santuario de Nuestra Señora de la Salud. Muy impresionante es el pesebre instalado en la colina del pueblo, que se organiza desde 1961 durante la época navideña.
Riomaggiore
Riomaggiore es la primera etapa para los visitantes que vienen del sur y es la ciudad más cercana a La Spezia. Riomaggiore es la más frecuentada y concurrida: esto se refleja en la gran cantidad de tiendas y cafeterías que podemos encontrar caminando por sus calles. El antiguo pueblo de Riomaggiore, que data del siglo XIII, se diferencia hasta hoy por las «casas torre» genovesas, muy coloridas y literalmente «aplastadas» en un valle estrecho y empinado. En el centro histórico, de particular interés artístico y arquitectónico se encuentra el Oratorio de la Assunta, que data del siglo XVI y la iglesia parroquial de San Juan Bautista, que data de 1340. La visita al castillo del siglo XIII en una acantilado rocoso y la cercana iglesia de Sant’Antonio.
Imperdible una visita al romántico jardín botánico, que también es un lugar para observar aves.
Dónde dormir
Para alojarse en las Cinque Terre, una solución agradable es el alojamiento que ofrecen las habitaciones de los cinco pueblos. Una solución alternativa podría ser alojarse en casas de huéspedes y hoteles en los cercanos Levanto y Sestri Levante, de donde empezar para visitar uno a uno todos los pueblos. En Monterosso recomendamos el B&B Il Parco, mientras que en Vernazza hay muchos pequeños hoteles de incuestionable encanto.