¿Sueñas con visitar la maravillosa capital de Italia y estás buscando un hotel donde dormir en Roma que no esté muy lejos del centro?
Es inútil decirte que la ciudad está llena de estructuras hoteleras listas para acoger a millones e visitantes, que cada año llegan a la ciudad para admirar sus maravillas.
Lo mismo vale para toda la región. De hecho, hay muchos hoteles en el Lacio, siendo especialmente atrayentes los que están ubicados en los encantadores pueblos de la misma.
Pero si tu prioridad es permanecer en el centro de la ciudad, rodeado de vida, cultura e historia, puedes pasar unos días en el Hotel Raffaello.
Estamos hablando de una estructura hotelera situada en un tranquilo barrio de Roma, e Rione Monti, uno de los más antiguos de la capital.
¡Y esto no es todo! Está situado en una zona muy cercana a la Estación de Termini, al metro y a algunos de los monumentos y lugares muy significativos de la ciudad:
- El Coliseo
- Los Foros Imperiales
- La Plaza Venecia
- La Fontana de Trevi
- La Plaza de España
Fori Imperiali. Roma. Credits: Settemuse.it
Gracias a su localización estratégica, podrás llegar sin dificultad a otros lugares de interés histórico-cultural que son auténticos símbolos de la ciudad.
Te garantizo que no te aburrirás ni un solo momento. ¿Sabes por qué?
Además de gozar de una visita a la ciudad de Roma, el barrio en el que se sitúa el hotel está lleno de locales, tiendas y restaurantes.
Sigue leyendo para descubrir otros servicios que este hotel romano pone a disposición de sus clientes.
Fontana di Trevi_Roma Credits: 10Cose.it
Cómo llegar a Roma – Rione Monti
En coche hay que recorrer la Via Salaria hasta el Grande Raccordo Anulare. Desde aquí, solamente tendrás que seguir las indicaciones hasta la estación de Termini.
Rione Monti está en una zona por la que solamente circulan los coches de los empadronados en la ciudad, por lo que es necesario informarse de los horarios.
En avión se aterriza en Roma-Fiumicino y se prosigue en tren hasta la Estación de Termini. Rione Monti dista a unos 700 metros.
En tren hay que bajar en la Estación de Termini y coger un taxi o proseguir caminando.
Dónde dormir en Roma: por qué elegir un hotel en el centro de la ciudad
Si has optado por un hotel en el mismísimo centro de la ciudad, ¿tendrás un motivo, verdad? ¡Antes de nada, está muy bien comunicado!
Pero no solamente eso: desde él es posible llegar a numerosos sitios y monumentos históricos caminando, gozando de la mágica atmósfera de la capital.
El Hotel Raffaelo de Roma es el lugar ideal para satisfacer esta particular necesidad, unida a una serie de servicios que harán tu viaje a Roma simple, agradable y único.
Una vez atravesada la puerta del hotel, un palacio de época restaurado, encontrarás un personal dispuesto a atenderte.
Un experto que, gratuitamente, te dará todas las indicaciones y consejos para vivir la ciudad al 100%.
Y no solamente esto. Por la mañana te esperará un delicioso desayuno, incluido en el precio, a base de tartas, fruta fresca, yogurt, cereales y mucho más.
¿Quieres saber más detalles? En cualquier momento del día podrás hacer una parada en la Área Longue del Hotel y saborear un delicioso café, un té o una infusión.
Fíate, no hay muchos hoteles italianos que ofrezcan este servicio. ¡Y las buenas noticias no terminan aquí! ¡Sigue con la lectura para saber más!
Dónde dormir en Roma: los mejores servicios que te ofrece un hotel en el centro de Roma
Si todavía tienes dudas sobre dónde dormir en Roma, estoy segura de que cambiarás idea apenas te explico en que consiste el Tratamiento de Sueños de Oro del Hotel Raffaello.
Para garantizarte un sueño profundo y restaurador tendrás a tu disposición un topper para el colchón y un amplio catálogo de los más variados cojines.
Esto significa que solamente tendrás que preocuparte por la tipología de cojín que más te conviene. Puedes elegir la clásica, la antialérgica, la anatómica etc.
Aquí encontrarás una serie de servicios especialmente estudiados para cubrir todas y cada una de tus necesidades. Solamente temdrás que pedir lo que quieras y obtendrás la estancia perfecta.
