Los barrios de Roma son todos característicos y se distinguen entre sí por peculiaridades únicas e irresistibles. ¿Qué decir de Trastevere? Con su ambiente bohemio, que perdura desde los tiempos de la clase obrera, hoy es conocido por sus restaurantes tradicionales, cervecerías artesanales y B&B sencillos y económicos.
Trastevere es un barrio auténtico, rústico, que permite degustar los platos de la verdadera cocina romana, desde carbonara hasta amatriciana, desde cacio y pimienta hasta gricia. En resumen, la tradición ciertamente no falta y es precisamente por eso que sus calles siempre están llenas de turistas equipados con una cámara. Pero, ¿qué hay que inmortalizar?
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Qué ver en Trastevere
El barrio de Trastevere en Roma, no es solo tradición y buena comida, es más: ¡está lleno de iglesias, monumentos y obras de arte que no debes perderte y hacer memorables tomando, precisamente, una larga serie de fotografías!
Piazza Trilussa
Frecuentada por los jóvenes en cualquier momento del día, Piazza Trilussa es el punto de referencia de Trastevere: desde aquí parten las calles que serpentean por todo el barrio y, justo enfrente, se encuentra Ponte Sisto, uno de los puentes más bellos de toda Roma.
La plaza está dedicada al poeta romano Trilussa junto con un monumento a la derecha.
Ponte Sisto
Frente a Piazza Trilussa se encuentra Ponte Sisto, que conecta Trastevere con la parte más céntrica de Roma. Al atravesarlo, se puede disfrutar de un hermoso panorama y vivir sensaciones emocionantes del pasado: su construcción, de hecho, se remonta a la Edad Media y ha visto pasar a un gran número de pueblos y culturas.
Basílica de Santa María en Trastevere
Después de cruzar el Ponte Sisto, es obligatorio hacer una parada en la Basílica de Santa Maria in Trastevere: que data del siglo IV, es el lugar de culto más importante del barrio. Externamente presenta una hermosa fachada decorada con mosaicos dorados, mientras que en el interior se encuentra la Capilla Ávila de Antonio Gherardi, una de las obras más importantes del barroco.
Plaza de Santa María en Trastevere
La Basílica mencionada se encuentra en la Plaza de Santa María en Trastevere, en el corazón del barrio. Los romanos aman detenerse aquí y descansar en la escalinata a los pies de la Fuente de Santa Maria in Trastevere, realizada por Donato Bramante y posteriormente perfeccionada por Gian Lorenzo Bernini y Carlo Fontana.
Villa Farnesina
Un edificio histórico que representa perfectamente la arquitectura renacentista es Villa Farnesina. En su interior se pueden admirar varias obras de Rafael y no solo: en la Sala de las Perspectivas, por ejemplo, se encuentran algunas obras maestras de Peruzzi realizadas jugando en la perspectiva.
Basílica de Santa Cecilia en Trastevere
La Basílica de Santa Cecilia en Trastevere es una de las iglesias principales del barrio y está dedicada a la Santa que, de simple noble romana, se convirtió en la patrona de la música. En su interior alberga un hermoso claustro rodeado de vegetación, una escultura dedicada a Santa Cecilia y la zona subterránea, rica en hallazgos arqueológicos imperdibles.
Piazza San Cosimato
Entre las plazas de Trastevere no pasa desapercibida Piazza San Cosimato que, cada mañana y durante todo el año, cobra vida gracias al mercado del barrio. No solo eso, porque gracias al parque infantil presente la plaza es también punto de encuentro para familias con niños, en un derroche de alegría y risas.
Basílica de San Crisogono
La Basílica de San Crisogono es una de las iglesias más antiguas de Roma, ya que su construcción se remonta al siglo IV. En su interior alberga frescos muy antiguos y suelos de mármol muy prestigiosos. Tiene una belleza muy particular, capaz de involucrar y distraer del hecho de que está justo en el centro de la Capital.
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Palazzo Corsini
El Palacio y la Galería Corsini consisten en uno de los museos más bellos de Roma, tanto que forma parte de la Galería Nacional de Arte Antiguo (la otra sede es Palazzo Barberini). La colección muestra obras de Bernini, Raffaello, Caravaggio y Tiziano.
Isola Tiberina
Para quien no lo sepa, Roma tiene también una isla: se trata de la Isla Tiberina que, aunque no pertenece al barrio de Trastevere, se encuentra a solo 5 minutos de distancia y justo en medio del río Tíber. Aquí también está el Puente Fabricio, que data del 62 a.C. y se mantuvo prácticamente intacto.
Templo del Bramante
Detrás de Trastevere, en la colina del Janículo, se encuentra el Templo de Bramante: según los relatos, surge en el punto exacto donde fue crucificado el Santo. En los últimos años ha adquirido cierta notoriedad por haber sido el telón de fondo de una escena de «La Grande Bellezza».
Fuente de Agua Paola
No muy lejos del Templo de Bramante está la graciosa Fontana dell’Acqua Paola, famosa por haber sido citada en la canción «Roma Capoccia» de Antonello Venditti. ¡A los romanos les gusta llamarla Il Fontanone!
Orto Botanico
Por último, antes de salir de Trastevere, es recomendable visitar el Jardín Botánico: se encuentra a pocos pasos del Fontanone y consiste en una zona totalmente inmersa en el verde, que alberga más de 3 mil especies vegetales, incluyendo un jardín de rosas, un jardín japonés y muchas plantas de bambú. Por cierto, al lado del Jardín Botánico, se encuentra Piazza Giuseppe Garibaldi, el corazón del Gianicolo que, al atardecer, ofrece una vista tan emocionante que deja sin aliento.
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